La llanura infinita y el cielo su reflejo. Deseo de ser piel roja. Leopoldo María Panero
miércoles, 25 de marzo de 2015
PROCESOS IV
La ilustración, tradicionalmente, ha sido una parte de las artes aplicadas, la imagen se ajustaba a lo que contaba el texto para completar su significado. Sin embargo, en este proceso no parto de un texto, o aunque haya tomado como punto de partida algún fragmento de alguna novela como detonante de la creación de la primera imagen, en proceso es a la inversa. Hay una inquietud a la que voy dando forma, una serie de miedos secretos que voy traduciendo en imágenes, como si de sueños se tratasen. Lo literario prescinde de la palabra, más tarde tocará encontrarla en este juego de despistes.
lunes, 9 de marzo de 2015
LECTURA EN EL BRITISH SCHOOL
Gracias a mis queridas libreras de cabecera, Raquel y Maider, de librería Chundarata, tuve la suerte de hacer una sesión de taller y lectura en el British School de Pamplona.
Con mis lecturas pretendo que los peques aprecien los colores de las frutas y hortalizas tanto con los ojos, como con la memoria y la imaginación. Intentamos observar y distinguir cómo los colores cambian según incida la luz, incluso según nuestros juicios previos. Así como una naranja no es sólo de ese color, sino que tiene verdes, amarillos, blancos o marrones, los colores que recordamos, como el agua de la piscina o el color del sol, dependen de más factores que el color en si mismo. Es importante escuchar cómo perciben nuestros compañeros el mundo que les rodea, porque nuestra propia visión se amplía con la suma de pareceres. El espíritu científico está presente en nuestras sesiones, y no debemos conformarnos con lo que nos dice nuestra intuición, debemos examinar cada pieza por dentro y por fuera; analizar su forma, texturas, olor y los más animados, su sabor. A partir de la observación, dibujamos aquello que hemos experimentado, y en cada sesión aprendemos algo nuevo con los personajes Pon y Morty de mi libro "Color en la cocina."
PROCESOS III
En la creación de historias, los símbolos y las atmósferas que las construyen son para mí igual de importantes que los personajes o las tramas. Lo literario duerme en los detalles.